Él era el novio perfecto. Pagaba las cuentas, llamaba todos los días, presentaba a su novia como “mi novia” y la mostraba como un trofeo recién ganado, hablaba utilizando el término “nosotros”, buscaba a su novia y la llevaba al cine, hacían el mercado juntos, la abrazaba en las mañanas al despertar, le abría la puerta del carro, la atendía y le colocaba la crema de las picadas de los mosquitos en las piernas, le daba muchos besos en público y le decía a diario que la quería. Incluso, le hizo espacio en su clóset para que ella se sintiera que tenía un lugar en su vida y en su casa.
Pero… estaba hueco por dentro.
¿Cómo es eso?
Pues así de simple. Detrás de la fachada de novio ideal, había un hombre sin relleno. Lo de adentro se había perdido en la última guerra, en el último bombardeo, en la última herida. Y él no sabía dónde había quedado “eso” (lo de adentro) y ella mucho menos.
Una parte de él, la de afuera, quería ser el novio perfecto y tener a una novia para hacer pareja y planes de futuro. La de adentro, no sabía lo que quería, debía tener relleno antes de poder saberlo.
Ella, una vez más, escogió. Lo escogió a él para ser su “novio perfecto y hueco”. Los primeros días no se percató de esta ausencia, él hizo maravillas por disimularlo. A los días, apareció el primer síntoma y luego el segundo, y el tercero, y el cuarto… y ya el sol no pudo ser tapado con ningún dedo de ninguna mano.
Una mañana ella se tomó un café, lo miró a los ojos y le dijo que se retiraba de la historia ideal y hueca. Él la miró con los ojos vacíos y respondió secamente: “Lo que no funciona, no funciona”. Ella se despidió y lloró camino a su casa. Él no sabe qué siente, sólo hay vacío y hueco en este momento.
Ella aún se pregunta para qué transita por la misma calle una y otra vez, la avenida de los hombres huecos. Y a la vez se alegra, porque cada vez el tránsito es más corto, menos doloroso y más consciente. Quizá, eso sea ganancia. Quizá sea un consuelo de tontos.
1 comentario:
¿Tienes algo en contra de los ingenieros?
Tu cuento ciertamente está relacionado con lo que escribí en mi blog, es como la contraparte, no sé.
Me gusta como escribes, porque es conciso y también ameno.
Gracias por linkear a mi blog, yo haré lo mismo con el tuyo, pero no por agradecimiento, sino porque de verdad me agradó.
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